Le jeu of creators
Rubén Carrasco se inspiró del deporte tradicional de Canadá para esta pieza

La obra de Rubén Carrasco suele evocar aspectos míticos y metafóricos de culturas nativas. Esta pieza de grandes dimensiones en un centro deportivo de Montreal es una excelente muestra de su línea temática, su técnica y estilo.
En este mural, Carrasco va de lo más local a lo universal. La inspiración surge del contexto inmediato y de los usos cotidianos del edificio (es un centro deportivo frente a un parque), al mismo tiempo que integra aspectos de la cultura canadiense y hace referencia a mitos de creación de culturas ancestrales de América.
Con selectos elementos, representa la conexión entre tradiciones, mitos de pueblos nativos y la relación entre los humanos y la naturaleza. El personaje central es un guardameta de Lacrosse, ataviado con ornamentos y protecciones de culturas nativas de América del Norte; mientras que en las piernas dibuja el plumaje de Coatlicue, la diosa madre azteca, considerada procreadora del dios de la guerra. “Esto me permitió unir de manera simbólica norte y sur”, menciona el artista.
Lacrosse es un deporte tradicional en Canadá, similar al hockey, que practicaban las primeras naciones del norte de América antes de la llegada de los europeos con fines rituales y políticos. “En los mitos se dice que este juego fue inicialmente exclusivo de los creadores y de distintas especies de animales antes de ser jugado por los humanos”, detalla Carrasco, quien reside en Montreal.
Artista:
Rubén Carrasco
(Puebla, 1976). En el Caribe mexicano comenzó su actividad profesional, su formación artística ha sido mayormente autodidacta. Además de muralista, ha sido escenógrafo, tatuador, diseñador, fotógrafo, galerista, curador y productor. En su pintura de estilo figurativo, alude a menudo a animales y a seres híbridos con los que hace reflexiones sobre conceptos existenciales, metafísicos y ambientales. “Me gusta la idea de la humanidad como el elemento artificial del planeta y con ello hacer una separación entre nosotros y el resto de los seres vivos”, comenta.
Es fundador del colectivo artístico "5 Wolves No Pigs" y cofundador del IPAF, un festival internacional de arte público que inició en 2014, en Holbox, y que ha tenido nueve ediciones en México, Canadá, Sudáfrica y Francia.